Este 1 de marzo de 2017
empezaremos el período de Cuaresma, un tiempo de purificación para llegar a
vivir más santamente la Pascua, el momento
central del año cristiano y que entraña el mayor misterio del universo:
la muerte y resurrección de Cristo, el Salvador del mundo.
Si bien en este tiempo Cuaresmal es
tradicional el ayuno, la oración y la limosna, es fácil poder constatar que actualmente
el ayuno es el más desvirtuado de todos. A partir del siglo V, en la Cuaresma,
sólo se permitía una comida, hacia la tarde-noche. La carne estaba prohibida, incluso
los domingos. Las carne y el pescado, y en muchos lugares los huevos y los
productos lácteos, estaban absolutamente prohibidos[1].
Con el tiempo, además de haber sido reducido a dos días al año, el ayuno es reducido
en muchas ocasiones a una mera renuncia de críticas, al menor uso de las redes
sociales o del móvil, a la falta de reproches, a la expresión de tristezas y
preocupaciones.
Desde AyunoXti, sin desmerecer
ese tipo de ayuno, queremos plantear un enfoque muy distinto aportando unas
consideraciones importantes.
Lo primero es que el ayuno, entendido
como una importante privación de alimentos o de una alimentación a pan y agua, no debe de entenderse como una práctica
sólo penitencial, sino sobre todo como un modo de orar con todo el cuerpo desde
lo más necesario, que es el comer y el beber, y de estar en la presencia
constante de Dios. El ayuno a pan y agua, por ejemplo, nos recuerda en todo
momento una necesidad que permanece consciente a lo largo del día y que de
forma continua nos devuelve la mirada al cielo recordándonos los motivos de esa
elección y entrega.
Lo segundo es que el ayuno es un sacrificio no postergable. Las redes
sociales, las compras, y otros muchos ayunos modernos que no se realicen a lo
largo del día, o incluso a lo largo de la Cuaresma, pueden recuperarse por la
noche, pero lo que no se ha comido no, por lo que la exigencia es mayor.
El ayuno, en tercer lugar, es recomendado en el mismo Evangelio (Mt
17,21) para librar una batalla que no se puede realizar con la sola oración.
Jesús hablaba del ayuno en términos clásicos de no comer apenas, no tanto la
reducción de malas intenciones y esfuerzos personales en las virtudes. A pesar
de ello, no se trata de elegir, sino de sumar. Quien decida rezar y ayunar de
malas intenciones, malas palabras, críticas, tristezas o enfados, si lo intenta
realizar en ayunas, descubrirá un trabajo totalmente diferente. El ayuno descubre todas nuestras debilidades y las
pone de manifiesto promoviendo la humildad y el autoconocimiento. El ayuno
desvela nuestro yo más propio. Hay quienes se hacen más criticones, quienes se
descubren más gruñones o quienes se sienten malhumorados o simplemente débiles.
El ayuno así entendido, entonces, nos propone
una purificación interior mucho más profunda y valiosa para nuestra
santidad y para nuestra oración.
Cuarto. El ayuno a pan y agua lo pide la Virgen María en prácticamente todas
las apariciones: desde las más conocidas y reconocidas por la Iglesia, como
Fátima o la Salette, a las que están reconocidas por la Iglesia pero no son muy
conocidas, como Akita (Japón) o El Cajas (Ecuador), hasta las que están
actualmente en vigor como Medjugorje[2]
y a la espera de un pronunciamiento oficial, pero que deja claro los frutos a
quienes lo conocen de cerca. Ya en la Didaché[3]
observamos que se mandaba a ayunar los miércoles y viernes, pero si la Santísima Virgen María insiste tanto
en el rezo del rosario y la práctica del ayuno, debería bastarnos para
iniciarnos, corriendo y con alegría, a asumirla durante todo el año y
reservar la Cuaresma para llevar al máximo la oración y la perfección en las
virtudes más puras.
El ayuno es la mejor forma para
luchar contra las fuerzas del mal[4]
porque nos devuelve la mirada a nuestra
debilidad, nos recuerda lo frágiles que somos, aquilata nuestra capacidad
de amar y hace que lo que salga sea más fuerte y más verdadero.
En AyunoXti somos más de 120 personas que
ayunamos los miércoles por la Iglesia, el Papa y los sacerdotes, así como las
intenciones de nuestra Madre del cielo. Pero
además cada vez incluimos unas intenciones particulares que nos llegan. Nos
piden que les apoyemos y recemos para la conversión de sus seres queridos, para
su sanación, para la salvación de matrimonios y la salud de enfermos de cuerpo
y mente, etc.
Esta Cuaresma proponemos doblar
los esfuerzos y ayunar el doble. Quien ayune sólo una comida, que intente dos,
quien un día que añada otro, quien ayuna dos que añada alguna renuncia. Es un
tiempo importante para unirnos en oración y contricción y pedir por este mundo
que cada vez se aleja dramáticamente más de Dios para lanzarse en las manos del
orgullo, lo material, el libertinaje, los apetitos menos nobles o el poder y
las guerras. Es necesaria una profunda renovación interior y una urgente
reparación del Corazón de Jesús y ¿qué mejor tiempo para adentrarnos en una
honda transformación interior que la Cuaresma?
Únete a nosotros y recuerda: Dios no elige a los capacitados,
sino que capacita a los elegidos.
Que pasemos todos una feliz Cuaresma
y podamos acercarnos más a Dios, a los demás y a nosotros mismos.
Paz y bien.
AyunoXti
FB: @ayunoporti
Inst: @ayunoxti
[2]
“Pido a las personas, que oren conmigo estos días y que oren lo más posible.
Que además ayunen de forma estricta los miércoles y los viernes; que recen cada
día, cuanto menos el Rosario completo: los misterios gozosos, dolorosos y gloriosos”
(Medjugorje, 14 de agosto de 1984).
[3]
La Didaché
es el documento más importante de la era post-apostólica y la más antigua
fuente de legislación eclesiástica que poseemos. Es un compendio de preceptos
de moral, de instrucciones sobre la organización de las comunidades y de
ordenanzas relativas a las funciones litúrgicas que nos dan un precioso
cuadro de la vida cristiana en el siglo II. Cfr. www.mercaba.org/TESORO/didaje.htm
[4] Cfr. S.S.
San Juan Pablo II, Carta Encíclica
Evangelium Vitae, n. 100.Tambien cfr. Mt 4, 1-11.
Bendecido día... tengo un poco mas de 3 años practicando el ayuno,fue un llamado que sentí en mi corazón.Al principio me costó, me sentía débil y caía varias veces.. Aún hoy en día me pasa que muchas veces caigo en tentación, es una situación difícil porque sabemos que cuando ayunamos y oramos es cuando mas se es atacado.. Gracias a Dios ÉL me da la fuerza para realizar ayuno, no me siento mal, y tengo energía.. han habido momentos que me siento débil pero el Señor me levanta... Ofrezco ayuno por muchas razones, entre ellas es que lo ofrezco al Señor por amor a ÉL y por las intenciones que se piden por la humanidad, la conversión , la paz, etc,.etc..... Muchas gracias por este artículo, me ha sido de gran ayuda y de soporte para desear seguir ofreciendo humildemente ayuno por tantas intenciones...Dios les bendiga.. CP (congregación Pasionista)
ResponderEliminarHola! Soy Maria Auxiliadora.
ResponderEliminarDe toda la vida, en mi familia hemos practicado el ayuno y la abstinencia todos los viernes del año, y durante la cuaresma. Yo particularmente, solo empecé a dar más importancia a eso, después de leer María te llama desde MEDJUGORJE. Desde entonces, ayuno a pan y agua, los martes y los viernes, coincidiendo con los misterios dolorosos del santísimo rosario.